Mi entorno _ Las cosas a mi alrededor.

El lugar en el que yo me siento segura, pudiendo ser yo misma y donde olvido todas las banalidades del día a día, es cualquier sitio donde pueda observar las estrellas mientras escucho música de fondo. Para poder describirlo mejor escogí un parque que visito de lunes a viernes a las seis y media para coger el metro que me trae a la UPV.

Realmente escogí este lugar porque, todos los lugares en los que veo las estrellas, este es el que más me gusta.

Desde aquí puedo observar como las luces crean sombras que crean formas abstractas, muchas veces ni siquiera se parecen al objeto que las crea. En medio del parque hay una especie de cúpula pequeña de unos tres metros de diámetro aproximadamente, esta hecha de cuerdas en forma de rejilla para que los niños puedan escalar creyendo en múltiples ocasiones que están en una gran montaña llena de nieve. A mi me fascina subirme a lo alto de esa cúpula y tumbarme de la forma que pueda entre esa rejilla de cuerda, observando como los edificios que rodean el parque forman, sin quererlo, una especie de marco, guardando dentro de él la mas hermosa de las pinturas que posee la humanidad, el cielo estrellado.

Cuando veo las estrellas normalmente comienzo a sentir esa ligera vibración provocada por el paso del metro, entonces me incorporo y sentada en lo alto de la cúpula, y mirando al frente, puedo llegar a observar a lo lejos como el metro se va acercando a la parada de Liria, final del trayecto, se estaciona ahí durante unos minutos. Me acerco pues a la estación y observo como los railes se alejan en una recta fugándose a lo lejos, allí donde mi mirada me permite ver.

En la estación, donde el metro acaba de estacionar, podemos observar como no baja casi nadie, una o dos personas tal vez, pero nada, no hay mas que 5 o 6 personas en todo lo que pueda observarse desde donde yo me encuentro, es normal que no haya casi nadie, al fin y al cabo, son las seis y media de la mañana en una ciudad pequeña alejada del barullo de las grandes ciudades.